Coworking público… ¿SÍ o NO?

Coworking público sí o no

 Dentro de no mucho tiempo llegaremos a los 1.000 espacios de coworking en España, con una proporción creciente de centros públicos… ¿Habrá sitio para todos?. Empecemos por el principio….

¿Donde estámos?

El coworking está madurando, y ello conlleva que se comiencen a visibilizar sus ventajas, muchas de las cuales se gestan a largo plazo. A su vez, existe una creciente atracción del sector público por esta forma de trabajar,  que está promoviendo espacios o acciones ligadas al coworking a lo largo de toda la geografía española. Hay que tener en cuenta que es una forma muy interesante de aprovechar infraestructuras, dinamizar el entorno y promover el talento. También hay espacios públicos que ya han sufrido un proceso de aprendizaje acelerado viendo como los espacios no se llenan por sí sólos, por muy bonitos o amplios que sean.

Por otro lado, las iniciativas privadas se van seleccionando de forma natural, quedándose por el camino aquellas que no estaban profesionalizadas o que no contaban con gestores plenamente dedicados a la generación de comunidades, y quizás pensaban que esto se trataba de un mero alquiler de sillas y mesas. El mundo de los centros de negocios también está virando en esta dirección, cada vez de forma más evidente… Con el tiempo quizás incluso se realicen desde ese ámbito propuestas muy próximas a los verdaderos espacios de coworking.

Retos de un espacio de coworking público

  • Competencia desleal con espacios privados. Si un coworking público no muestra sensibilidad con espacios privados de su ciudad puede llegar a poner en peligro la existencia de los mismos, y con ello la de sus comunidades de profesionales, proyectos en marcha…

  • Análisis de los perfiles socioeconómicos. El acceso a un espacio de coworking público en condiciones que suponga un coste neto para la administración local debería estar regulado. No tiene demasiado sentido que profesionales solventes se beneficien de servicios pensados para quien no pueden permitirse  el acceso a un coworking en condiciones de mercado.

  • Regulación de los plazos. ¿Es conveniente fijar un plazo máximo de permanencia en un espacio de coworking público?. En mi opinión sí, y sobretodo cuando los precios se fijan por debajo del mercado, en consonancia con el punto anterior.

  • Dinamización del espacio. Los espacios de coworking privados suelen contar con gestores muy implicados, que están  buena parte del tiempo en contacto directo con la comunidad. Esto ayuda tanto a reforzar los lazos entre coworkers como a generar actividad en el centro. En los espacios públicos a veces este rol no existe, por lo que el nuevo coworker se encuentra a su llegada con un espacio en el que nadie ejerce como anfitrión y resulta mucho más frío.

  • Cambios políticos. Los cambios políticos por desgracia a veces pueden conllevar que espacios públicos que funcionan correctamente sufran profundas modificaciones o sean simplemente eliminados por tratarse de proyectos ajenos a la corporación vigente. Sería deseable que un proyecto que cumple una función social de forma adecuada se mantenga en el tiempo a pesar de cambios en el panorama político local.

  • Colaboración con agentes diversos. Un espacio de coworking, público o privado, debería ser capaz de colaborar con todos los agentes sociales y económicos de su entorno, intentando sumarse a iniciativas existentes y haciéndolas más fuertes, en lugar de dividirlas o crear las suyas propias por cuestiones políticas.

Entonces…¿coworking público sí, o no?

SÍ, sin duda. La generación y el impulso de un punto de encuentro para el talento debería ser una premisa para el desarrollo local, sobretodo cuando la iniciativa privada tiene dificultades para promoverlo por tratarse de poblaciones pequeñas. Tengo muchas más dudas cuando hablamos de ciudades con un ecosistema consolidado o con espacios privados de referencia, en las que prestar un servicio similar puede hacer peligrar las iniciativas existentes. En estos casos, la colaboración público privada debería ser la herramienta mediante la cuál impulsar esta forma de trabajar y facilitar el acceso y el desarrollo de profesionales y nuevos proyectos empresariales.

Diego Tomás (@diegotomases)

Consultor coworking. Servicios profesionales para espacios de trabajo colaborativos. 

Presidente Jóvenes Empresarios Medio y Alto Vinalopó (Provincia de Alicante)

 

 

Coliving y otras tendencias mundiales en coworking

Coliving y otras tendencias mundiales en coworking

La Coworking Europe es uno de los eventos clave para los gestores de coworking de todo el mundo. En la última edición más de 300 apasionados por esta forma de trabajar nos dimos cita en Milán para escuchar y compartir experiencias.

Estas son algunas de las conclusiones a las que pude llegar.

1. PROFESIONALIZACIÓN DE LOS ESPACIOS PRIVADOS

Se veía venir. El sector va madurando y empiezan a aparecer grandes operadores. Con éstos, mejora el know-how de los espacios medianos que poco a poco van estableciendo procesos de gestión más formales. Empiezan a pensar como proyectos empresariales. Este fenómeno, en las fases iniciales del coworking, no estaba del todo claro.

Muchos centros de negocios tradicionales incorporan secciones de coworking o intentan adaptar su mensajes a valores más abiertos y colaborativos.

Aparecen redes de espacios propios o agrupados bajo la misma marca que promueven el coworking como un estilo de vida. Su reto es no dejar de lado conceptos como la comunidad.

Los centros grandes y medianos (>300m2) van teniendo una experiencia que permite consolidar procedimientos y requiere la participación de un equipo.

Los pequeños coworking son generadores de pequeñas comunidades de profesionales que permite a sus gestores crecer profesional y personalmente mientras se procuran el autoempleo. Probablemente sea en estos lugares donde más fácilmente se pueden apreciar los conceptos de comunidad y colaboración de los que tanto hablamos siempre.

2. EL INTERÉS DE MARCAS Y GRANDES EMPRESAS

En la medida en que los grandes demuestran su poderío abriendo decenas de espacios al año y los existentes dan muestras de su solidez.  Tanto grandes marcas como empresas medianas están dispuestas a vincularse con el movimiento coworking.

Las grandes marcas apoyan eventos de forma habitual, e incluso muchas de ellas desarrollan sus propios espacios o se vinculan de forma directa con los que sean capaces de transmitir valores positivos para ellas.

Las empresas tienen en el coworking un modelo al que seguir muy de cerca, por todo lo que pueden obtener de este modelo…. Desde una fuente inagotable de talento hasta formación innovadora o dinámicas de trabajo diferentes…  Te recomiendo echar un vistazo a uno de mis posts en el que hablaba precisamente del COWORKING PARA EMPRESAS.

3. ESPACIOS COWORKING COMO CENTROS DE HABILIDADES PROFESIONALES

En los centros de formación más tradicionales no se pregunta a los alumnos lo que no saben antes de ofrecer la formación. Pero en muchos espacios de coworking sí que son los profesionales los que dicen abiertamente qué creen que necesitan para seguir evolucionando: «Me gustaría aprender a expresarme mejor» , «¿Cómo agrupo mis cuentas de e-mail?», «Quiero aprender a hacer publicidad en facebook», . «¿Cómo puedo hacer aplicaciones en IOS?» «¿Cómo se planifica un proyecto?», «¿Cómo puedo crear mi propio blog?», ¿Cómo puedo aprender a ser más productivo?… Estas y otras muchas dudas dan lugar a una formación específica y de carácter MUY práctico, que habitualmente es bien recibida por los coworkers. Pero incluso la suele aceptar mejor la comunidad de profesionales en el entorno más próximo del espacio de coworking… al final se trata de una formación muy recomendable para cualquier empleado (y desempleado), directivo, empresario, freelance, comerciante…

Y con ese carácter de academia de habilidades prácticas, se organizan programas cada vez más completos, que complementan los huecos que deja el sistema de educación tradicional.

4. ADMINISTRACIONES IMPULSANDO ESTA FORMA DE TRABAJAR

Impulsar y atraer el talento, favorecer la colaboración entre profesionales y empresas, dinamizar el entorno, generar oportunidades…. Suena bien , ¿verdad?. Las administraciones también se han dado cuenta de ello, especialmente en el sur de Europa donde la problemática del empleo…o mejor dicho su escasez… es una de los quebraderos de cabeza principales de gobiernos locales, provinciales, autonómicos, nacionales e internacionales…

Pero el ámbito del coworking de momento es fundamentalmente local y por ello son los Ayuntamientos los que más intensamente se están aproximando al coworking. Algunos de ellos con muy poco acierto. Pero otros con la prudencia y asesoramiento necesarios como para tener en cuenta que los objetivos de un coworking público no son exactamente los mismos que los de un coworking privado. Pero esto lo trataremos en detalle otro día.

Hay espacios de coworking públicos que viendo la aceptación de los espacios privados han pensado que su gestión era algo sencillo…y se han habilitado espacios, pero sin dotarlos de personal más que alguien para abrir y cerrar sus puertas…si al final…»son espacios de oficinas con sillas y mesas…¿qué más hace falta?»…sin comentarios…

Otra aproximación más exitosa ha sido la de ofrecer precios muy atractivos…simbólicos…que son un instrumento genial para facilitar el acceso a esta herramienta a quienes gozan de menos posibilidades… Pero… desde el momento en que no se hace una selección adecuada de los candidatos a un coworking público o se establecen períodos racionales para promover su rotación…nos vemos las situaciones más disparatadas…

Existen sin embargo ejemplos de espacios públicos que sirven de verdaderas locomotoras de sus barrios, promoviendo eventos de todo tipo y ayudando a fomentar el coworking como forma de trabajo. Pero en estos casos de forma habitual se ha contado con gestores especializados o asociaciones que han colaborado en la dinamización. Incluso hay personal de la administración que se ha formado adecuadamente para desarrollar esta labor.

5.  DIGITAL NOMADS Y EL CO-LIVING

Los nómadas digitales son profesionales que pueden desarrollar su actividad de forma remota, y que optan por un modo de vida itinerante, al menos durante una etapa de sus vidas. Para ofrecer una solución atractiva a estos perfiles, han nacido en diferentes destinos internacionales espacios de trabajo dotados de comodidades suficientes para alojar allí temporalmente a estos inquietos trabajadores: bloggers, community managers, desarrolladores de software, diseñadores gráficos, periodistas, fotógrafos, escritores, diseñadores web… A esto se le viene denominando COLIVING

En definitiva, estamos hablando de un sector jovencísimo que evoluciona muy rápido, por lo que los encontramos interesantísimas propuestas con muy diferentes formas de gestión. Uno de los retos es poder medir de forma eficaz el beneficio social y económico que pueden llegar a  producir los espacios de coworking en su entorno, para que de forma coordinada, administraciones y empresas privadas apuesten definitivamente por llevar esta forma de trabajar a otro nivel.

 

Diego Tomás (@diegotomases)

Gestor y asesor de espacios de coworking.

Cofundador de PBC Coworking.

Servicios profesionales para espacios de trabajo colaborativos. 

Presidente Jóvenes Empresarios del Vinalopó (Provincia de Alicante)

 

7 funciones de un espacio de coworking

funciones de un espacio de coworking - diego tomas -

No importa a lo que te dediques… pero ¿te imaginas que te ves obligado a trasladarte a otra ciudad o que simplemente quieres conocer su clima profesional y empresarial? ¿Qué te parecería que existiera un punto de encuentro para los profesionales del entorno en el que poder trabajar, estar al día y hacer contactos? ¿Y si además en esos lugares ayudaran al talento local a contactar con otros espacios como este en otras regiones?…

Esto no es ningún paradigma. Estos espacios existen y llevan años trabajando. Incluso hay referentes que cuentan con representación en muchos países.

Pero estos lugares, llamados espacios de coworking, de trabajo colaborativo, hubs… han aflorado en las grandes ciudades, pero no se han extendido como debieran en todas las provincias ni en todas las localidades. Y en demasiadas ocasiones prolifera únicamente con un argumento de reducción de costes compartiendo oficina.

Este post es una defensa de la rentabilidad social que puede generar un espacio de este tipo en cualquier ciudad. Por supuesto mi visión del coworking puede ser subjetiva, pero es fruto de asimilar los valores de esta forma de trabajar e intentar aplicarlos de la forma que más útil considero para la sociedad.

Ahí van 7 funciones que en mi opinión cumplen los espacios de coworking «de verdad» en las ciudades, grandes o pequeñas:

  1. PLATAFORMA DE CONTACTOS. Sólamente sumando todos los contactos de las agendas de los coworkers de un espacio, tendría sentido este argumento, pero además el dinamismo de sus gestores debe ser capaz de facilitar las cosas gracias a su contacto permanente con otros profesionales y empresarios, administraciones, universidades, asociaciones…
  2. PLATAFORMA DE COMUNICACIÓN. Un espacio activo es capaz de generar un flujo de noticias suficiente como para convertirse en un foco permanente de atención, y convertir a sus coworkers en los verdaderos protagonistas, facilitando así una labor a la que el profesional habitualmente puede dedicar poco tiempo.
  3. PLATAFORMA DE FORMACIÓN. El conocimiento que se comparte en un espacio de coworking dinámico ya supone una fuente casi inagotable de recursos, pero además lo habitual es que en ellos se prodiguen los eventos formativos. Si son de carácter práctico y solucionan problemas reales, mucho mejor. Además, muchos de ellos abordan tanto el crecimiento profesional como el personal.
  4. FOCO DE INNOVACIÓN. Una visión global como la que debe predominar en un lugar así permite estar al día en herramientas y avances que provienen de todo el mundo, en ocasiones desde espacios similares, por lo que se convierte en un lugar de transferencia permanente de innovación hacia su entorno más próximo.
  5. FUENTE DE TALENTO COLABORATIVO. Una comunidad de profesionales donde se estimula la creatividad y la colaboración necesariamente es un buen caldo de cultivo para el talento, del que a su vez se beneficia el municipio, la comarca, la provincia…
  6. CONECTORES DEL TERRITORIO. Los espacios de coworking pueden ser magníficas vías para conocer lo que está ocurriendo en lugares cercanos similares e interactuar con sus miembros, detectando oportunidades de negocio o simplemente conociendo formas diferentes de hacer las cosas. Con un pequeño esfuerzo se puede ejercer una función vertebradora dentro de una provincia, comunidad autónoma, etc…
  7. GEOLOCALIZADORES DE PROFESIONALES. Un lugar frecuentado por un grupo de profesionales dinámico y ubicado geográficamente es un lugar al que otros profesionales y empresas acuden para buscar colaboradores, y de los que además pueden tener referencias de forma inmediata.

Sin duda cada uno de estos puntos se podría desarrollar ampliamente, cosa que iré haciendo próximamente, pero en este post el objetivo era poner en valor la existencia de espacios de este tipo. Si consideras alguna función adicional de los espacios de coworking , ¡por favor no dudes en comentarla! ¡Sin duda hay muchas más!

 Diego Tomás (@diegotomases)

Gestor de espacios de coworking. Servicios profesionales para espacios de trabajo colaborativos. 

Presidente Jóvenes Empresarios Medio y Alto Vinalopó (Provincia de Alicante)